Pensamiento 1: Perdida

Me encontraba tan sola, todo era deprimente a mi alrededor, no quedaba esperanza, ya no tenía fe en nada, ¿para qué? Se desvanecería en cualquier momento, estaba segura.

Me escondía en una esquina rodeada de oscuridad, sin nadie a mi alrededor, todo eran pensamientos oscuros, malas intenciones....lo dicho, ya no quedaba esperanza alguna.

Quería rendirme, pero me daba miedo ser absorbida por la oscuridad, si, tenía miedo, es un sentimiento normal...

El tiempo seguía pasando y yo estaba casi en mi límite, mirando esa oscuridad que estaba tan deseosa de tenerme, de que me rindiera, cuando de pronto pude ver algo...era una luz, muy tenue, pero que según pasaba el tiempo iba creciendo. Me daba una sensación de tranquilidad, seguridad, paz...pero aún así había miedo.

Seguía mirando como crecía, hasta que me di cuenta de que lo que estaba haciendo era acercarse a mi. Notaba una calidez aún mayor, eso iba haciendo que mi miedo desapareciera poco a poco, hasta que estuvo en frente mía, tendiéndome lo que parecía una mano, invitándome a irme de la oscuridad que me rodeaba. Sin pensarlo, estiré mi mano y me "agarré" a la suya y me levanté.

Por fin, después de tanto tiempo, me sentí libre.

"Entre toda aquella oscuridad, me encontraste y me sacaste de allí."